El Zinc Mecánico es un proceso extendido ampliamente en el sector de la automoción, que consiste en el recubrimiento metálico de piezas de hierro o acero sin usar sistemas electrolíticos.
Las características principales del proceso son:
– Carencia de fragilización por hidrógeno, evitando el deshidrogenado.
– No se utilizan aclarados intermedios.
– Se consigue una excelente adhesión y uniformidad del recubrimiento.
Como se puede observar, su característica más importante es ofrecer depósitos metálicos de protección anticorrosiva totalmente exentos de fragilidad por hidrógeno. El proceso se basa en la deposición mecánica de metales, la cual se consigue al introducir las piezas en una campana o bombo rotativo basculante junto con bolas de vidrio. Por frotamiento y con la adición de los productos y aditivos correspondientes se consigue la metalización, aplicando después el acabado deseado, ya sea blanco, negro, bicromatizado o js-500. La separación de piezas y bolas se realiza inmediatamente después de la metalización, en un separador magnético por imantación, usado conjuntamente con una tolva con vibración. La centrífuga es automática con variador de velocidad para evitar golpes en el secado en piezas de rosca fina; es de apertura automática y consta de un temporizador y de controles de temperatura. Todo el proceso esta automatizado para evitar mermas, golpes o problemas de acabado final en la pieza. Además de los acabados en blanco (CrIII) y bicromatizado (CrVI y CrIII), estamos en disposición de ofrecer acabados en js500 y torque’n tension. No son muy comunes, pero también es posible realizar el acabado en negro para este proceso.